Moises Farberof con Alberto LLeras Camargo

Moises Farberoff

Al promediar la década de los años diez del siglo XX varios europeos llegaron a integrar la colonia judía de Medellín, entre ellos los hermanos Rabinovich de quienes, al decir de Albéniz Vélez: “Se decía que llegaron pobres a la ciudad y empezaron vendiendo telas de casa en casa cuyo muestrario ofrecían a la mano colgado del brazo. Los llamaban maneros, y se idearon la forma de vender a crédito para pagar por cuotas semanales que anotaban en una tarjeta El truco consistía en pedir como primera cuota el valor de la pieza al costo, y arriesgar las ganancias a crédito confiados en la buena fe de los deudores. Como eran más los que pagaban cumplidos que los que se perdían, consiguieron plata”. Esto es confirmado por el periódico El Espectador el 13 de mayo de 2008 en el artículo “El cementerio de los judíos” de Luisa Fierro, que dice:
Telsa (sin fecha)
“Los judíos comenzaron a llegar a Colombia después de la Primera Guerra Mundial, procedentes de Rumania, Rusia, Polonia, Lituania, ustria, y el norte de África. Buscaban ganarse la vida, y huir de los tristesrecuerdos que les traían las tierras donde crecieron. Según cuenta Azriel Bibliowicz en su novela El rumor del Astracán, las primeras colonias que llegaron a Colombia le habían escuchado decir a un judío que había visitado a Bogotá que: “Latinoamérica es el lugar donde se prospera”. Así que muchos llegaron llenos de ilusiones y se dedicaron al comercio. Pusieron almacenes de e impusieron prácticas novedosas: vendían la mercancía a crédito y ofrecían productos de casa en casa. Si en el almacén sevendía a tres pesos, a plazos se vendía a 10. Los clientes pagaban veinte centavos por semana y tenían la oportunidad de pagar toda la deuda al terminar el año. Para 1950 ya había comunidades organizadas con cementerio, club y colegio propio”. Los ancestros de los Rabinovich de Medellín vivían en Rusia antes de la primera guerra mundial, y es posible que fuera esta guerra la que los obligó a emigrar hacia Medellín, Colombia, ignorándose por qué fue esta la ciudad de su destino y no cualquiera otra de Latinoamérica. Dice don David Rabinovich Geller en Tableros de Mensajes que:
https://www.ancestry.mx/boards/authorposts.aspx?uid=&uem=Eyzw5YJpnmjdd7amQ53bAseYQsxnvd67 “Mi familia emigró de Gomel a Krasnoyarsk de Siberia en Rusia alrededor de 1912, de allí pasaron a Medellín, Colombia. Dos hermanos, Saúl e Itzaak de Gomel, dieron lugar a tal vez doce o quince familias judías en Medellín. Escuché a mi padre decir en los años sesenta, que había oído que sus antepasados provenían inicialmente de Michailob. La esposa de Saúl, Guita, llegó a Medellín donde murió en 1937. Su nombre de familia era Geller (Heller o Heiller inicialmente)… La esposa de Itzaak era una Altzschuler. Hablé en Moscú con una prima, una nieta de Guita, quién murió hace unos diez años, y ella verificó un poco de la historia de la estancia en Krasnoyarsk”.
https://www.elespectador.com/impreso/bogota/articuloimpreso-el-cementerio-de-los-judios
Telsa

Lorena, supongo, debió ser una dama muy querida por su señor que quiso homenajearla poniéndole su nombrea la finca que adquirió en la fracción de La América (antes barrio La Granja) de Medellín. Por ese entonces, ni se pensaba en que llegaría a urbanizarse el sector de Los Laureles que se convertiría no sólo en barrio sino en comuna de la ciudad. Tampoco se pensaba en que la finca Lorena habría de convertirse en uno de los barrios de esa comuna. Su finca contigua, que era de propiedad de don Gonzalo Altzschuler; que junto con sus primos David, Enrique, Isidoro, y Salomón Rabinovich Geller; y con su otro primo Simón Chaikin; fundaron y construyeron en ese lote una fábrica de tejidos. El lote, deaproximadamente 16.800 M2, costó $1.400 en el año de 1933. No eran una bicoca. Al decir de un extrabajador de esa fábrica: “Alguna vez oí decir; no recuerdo si a Jorge, el hijo de don Moisés Farberoff Rabinovich, o a don Enrique Serebrenik; que del conflicto con el Perú fue de donde los Rabinovich tomaron el nombre para la fábrica”.

Patio Telsa

Acababa de terminar la guerra colomboperuana (1932-1933) y el nombre de Leticia estaba en boca de todos. Fue ese el nombre escogido por los Rabinovich y Cía. para su Fábrica de Tejidos Leticia S. A. (Telsa)que se publicitaba “Telsa, calidad excelsa”.
Cerrada la fábrica, ya en los comienzos del siglo XXI, esos terrenos sobre la Avenida 80 fueron adquiridos y ocupados por el gran Almacén Éxito de Laureles con su “Centro Comercial Viva”, y por detrás fueron construidos el Mall de Laureles y la Ciudadela Residencial Laureles al lado suyo.
La denominada Avenida 80 es una vía circunvalar en el occidente de la ciudad que a estas alturas delrecorrido equivale a la carrera 81 de la nomenclatura urbana, y por detrás del Mall y de la Ciudadela Laureles corre la “verdadera carrera 80”. Frente a la ciudadela, en la verdadera carrera 80, quedaba un estadero bar denominado “El Paraguas”, que era muy concurrido por los empleados de la fábrica a lasalida de sus turnos de trabajo, pero había otros que eran los preferidos por los obreros.

Agradecimientos especiales a Familia Manevich